Una de las poquísimas cruces que han sobrevivido a la turbulenta historia de Afganistán se encuentra junto a la cima del Sakhaur (7.116 metros), una de las montañas más atractivas de la cordillera del Hindu Kush. Una expedición navarra coronó la cima en 1976, cuando aún faltaban dos años para que los primeros tanques soviéticos entraran a Kabul. Formaban el grupo Javier Garreta, Gregorio Áriz, Leandro Arbeloa, Javier Garayoa, Trini Cornellana, Julián Lasterra, Julián Ayúcar, Gerardo Plaza, Abel Alvira, Iñaki Aldaya y Javier Pastor. Diez de los once montañeros pudieron hacer cumbre, pero en el descenso se produjo un accidente fatal: la cordada formada por Leandro Arbeloa y Gerardo Plaza patinó en el hielo y se precipitó por un cortado. Leandro falleció al golpearse violentamente la cabeza y Gerardo quedó malherido. El traslado del cadáver era imposible y los alpinistas optaron por enterrarlo en la ladera de la montaña. La cruz que improvisaron con su piolet quedó como único distintivo de la tumba. Hay cientos de cruces en muchas otras montañas de todo el mundo. Esta de la fotografía se encuentra en el Balerdi y hoy quiere recordar a Iñaki de Ochoa de Olza, fallecido en el Annapurna, a 7.500 metros de altitud, muy cerca del cielo.
sábado, 24 de mayo de 2008
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1 comentario:
Algunos las arrancan, Javier. Algunos las arrancan...
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